Hola ¿Qué tal?

Estamos entrando a la cuarta semana de guerra con dos frentes abiertos, el
militar y el diplomático. Los dos empantanados y sin un rumbo cierto.
En el plano bélico, Rusia continúa con una retaguardia muy endeble. No
logra mejorar sus problemas de abastecimiento y continúa perdiendo tanques,
baterías de misiles, helicópteros y aviones. Eso, gracias a los lanza misiles de
última generación que Europa y Estados Unidos les entregaron a las fuerzas
ucranianas. Para compensar esta falencia, los rusos están atacando a sangre y fuego las ciudades del sur con el objetivo de cerrar el círculo sobre cualquier
salida ucraniana al mar.

Mariupol, el puerto clave sobre el Mar de Azov, está siendo
bombardeada desde hace 15 días. Buena parte de la ciudad ya está convertida
en escombros. Ayer destruyeron un enorme teatro que servía de refugio para
cientos de personas. Hay algunos sobrevivientes y continúan sacando cuerpos
de bajo los escombros. Probablemente nunca sepamos el saldo de lo ocurrido.
Quedará para la memoria del horror.

Los generales de Putin necesitan tropas frescas para continuar con el
avance. Están movilizando un regimiento desde Ossetia, en Georgia, y
desembarcaron centenares de marines en las costas de Ucrania para
trasladarlos en camiones y reforzar el frente que intenta aislar a Odessa.

En el plano diplomático, el presidente Volodymyr Zelensky continúa
con su tour de apelaciones a la solidaridad ante los parlamentos de diferentes
países. Hoy fue el turno de Alemania. Les reprochó a los germanos el haber
tenido una actitud ambigua cuando comenzó la amenaza rusa por depender del gas que les manda Putin para calentar sus casas. Ayer dio un magnífico
discurso ante el Congreso pleno de Washington y logró un apoyo impensable
por parte de legisladores de los dos países.

Biden anunció de inmediato la entrega de otro paquete de ayuda militar de 800 millones de dólares. Y varios congresistas, tanto demócratas como republicanos le están pidiendo a la OTAN que reconsideren su posición de no imponer una zona prohibida de vuelo sobre el espacio ucraniano, como lo viene pidiendo Zelensky desde hace 17 días.

Lo de las conversaciones de paz y los 15 puntos que discuten en forma
virtual las delegaciones ucraniana y rusa, que tratamos ayer en forma más
extensa y que pueden tener más detalles en la nota que publicamos hoy en el
portal de Infobae, no hay novedades. Está prevista una nueva reunión virtual.
En las redes sociales, miles de ucranianos le están pidiendo a Zelensky que no
ceda ni un milímetro la posición nacional porque ellos están dispuestos a
luchar hasta las últimas consecuencias.

En unas horas les envío una nueva newsletter con más información
sobre los dos frentes.

Muchas gracias por el tiempo que se toman para leer cada envío.
Saludos,